miércoles, 25 de abril de 2012
Historias ajenas
Cuando más perdido estaba apareció entre los cientos de personas que uno se cruza cada día. La ilusión que había perdido con el paso de los años volvió a mostrarse ante su rostro. La naturalidad de su mirada, la pureza de su sonrisa, la sinceridad de su palabra le mostraron un nuevo camino y volvió a sentir que todo era posible.
Al final de aquel sinuoso camino no podía haber nada más que puertas abiertas y más caminos por recorrer...
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Todo ES posible. Preciosas palabras, te las tomo prestadas... GRACIAS por estar.
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